Bono sigue firme en su camino a convertirse en un nuevo Lars Ulrich, así como el baterista de Metallica, el líder de U2 reniega de las descargas en la Internet.
En su columna del 3 de enero en el New York Times, Bono expone 10 cosas que debemos mejorar en esta nueva década, entre la lista hay una que destaca por si sola, donde habla sobre la propiedad intelectual.
Según Bono lo único que viene salvando a la televisión y al cine es el peso de los archivos, que a diferencia de los de música son más pesados, pero también reconoce que con el aumento del ancho de banda, este impedimento desaparecerá y “podrán bajarse toda una temprada de la serie ‘24′ en 24 segundos”. El cantante asegura que los únicos que se llenan los bolsillos gracias a las descargas son las ISPs y que los que pierden son los creadores de música y los sellos discográficos.
Bueno Bono, bueeenooooooo… allá tú, como le escuche decir alguna vez al penalista español David Bravo sobre un caso similar hace un par de años:
“Además este tipo de declaraciones, evidentemente, consiguen un efecto contrario, y es que la gente se enfade más y termine descargando mucho más ya como un acto de mera disidencia. Porque es insultante que una persona que viene a España, da un concierto de dos horas y se embolsa 100 millones de pesetas, este hablando sobre sus problemas económicos porque vende pocos discos… si tu dices eso y pretendes que la gente llore por tus problemas económicos lo que vas a conseguir es que piensen lo que la mayoría ya pensamos, y es que es un rico chiflado”
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